A raíz de los efectos que ha tenido la crisis del COVID-19 a distintos niveles y en diversos sectores y de la gestión que de ella están haciendo los países europeos, Water Europe preparó y publicó el documento A Water Smart Society for a successful post COVID19 recovery plan (Una “Sociedad Water Smart” para un plan de recuperación post-COVID19 exitoso). En él, la asociación enfatiza la importancia del agua como habilitador clave para la aceleración de la recuperación hacia una Europa unida y resistente tras la pandemia.
Europa no es ajena a una mala gestión del agua
Según Water Europe, el coronavirus es un “toque de atención” que ha demostrado cómo la Unión Europea y sus Estados miembros “no están bien preparados para las crisis transfronterizas e intersectoriales”. En este sentido, el documento apunta: “El agua no conoce fronteras y es un activo para Europa. Podemos utilizar el agua como habilitador para reiniciar y acelerar la recuperación de nuestra sociedad gracias a sus interacciones con todos los demás sectores. Como parte de nuestro patrimonio natural y cultural, el agua no es solo una cuestión de disponibilidad de recursos, sino también una cuestión de oportunidades y resiliencia a través de sus vínculos con el clima, la infraestructura, la digitalización, la biodiversidad, la alimentación, el turismo, el transporte, el comercio o la energía”.
De hecho, el informe resalta que más del 75% de empleos depende de un suministro de agua óptimo y añade que “invertir en el sector del agua en Europa contribuye a crear un crecimiento sostenible y empleos verdes con un alto retorno de las inversiones en todos los sectores”.
Con motivo del Día del Agua del 2020, recogíamos en este blog los esfuerzos de la ONU en la línea de reforzar el papel de las Aguas Residuales como un recurso. La crisis sanitaria y social generada por el COVID-19 ha intensificado el abordaje del asunto: “pongamos, definitivamente, el foco en el agua y trabajemos las diferentes perspectivas del recurso”, parece exclamar Water Europe. Y es que, según la OMS – y como se puede leer también en el documento de la asociación -, “los beneficios económicos de invertir en agua y saneamiento son considerables: incluyen una ganancia global estimada del 1,5% del PIB mundial y un rendimiento aproximado de 4 euros por cada euro invertido en servicios de agua y saneamiento y otros sectores”.
De hecho, el informe resalta que más del 75% de empleos depende de un suministro de agua óptimo y añade que “invertir en el sector del agua en Europa contribuye a crear un crecimiento sostenible y empleos verdes con un alto retorno de las inversiones en todos los sectores”.
Con motivo del Día del Agua del 2020, recogíamos en este blog los esfuerzos de la ONU en la línea de reforzar el papel de las Aguas Residuales como un recurso. La crisis sanitaria y social generada por el COVID-19 ha intensificado el abordaje del asunto: “pongamos, definitivamente, el foco en el agua y trabajemos las diferentes perspectivas del recurso”, parece exclamar Water Europe. Y es que, según la OMS – y como se puede leer también en el documento de la asociación -, “los beneficios económicos de invertir en agua y saneamiento son considerables: incluyen una ganancia global estimada del 1,5% del PIB mundial y un rendimiento aproximado de 4 euros por cada euro invertido en servicios de agua y saneamiento y otros sectores”.
Una sociedad que gestione el agua de manera inteligente para una Europa mejor
En definitiva, Water Europe señala la necesidad de un “nuevo paradigma hacia una ‘Sociedad Water Smart’, desde la gestión de crisis hasta la gestión y prevención de riesgos en Europa y más allá”. Esta es “la única forma sostenible”, explica, de reiniciar la economía rápidamente y construir una Europa “unida y resistente”.
A partir de este análisis, en el informe quedan reflejadas algunas recomendaciones para perfilar dicha “estrategia post-COVID19” demandada, que son:
- Trabajar para lograr una “Sociedad Water Smart” para reimpulsar y construir una Europa resistente.
- Apoyar la digitalización para un crecimiento sostenible impulsado por el agua.
- Fomentar una “Sociedad Water Smart” inclusiva para todos los ciudadanos.
- Reforzar el liderazgo europeo para mejorar la solidaridad internacional.
A modo de conclusión, Water Europe sugiere desarrollar y apoyar iniciativas para “reclutar y retener a jóvenes profesionales en el sector del agua”, pues, asegura, en las personas está la clave para construir la “nueva” sociedad. Y, de la misma manera, nombra a los negocios, los cuales – considera la asociación – deberían “invertir” en línea con el Acuerdo Verde y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU.
Con más de 60 años de experiencia, DAGA lidera el desarrollo de equipos para el tratamiento de aguas residuales (EDAR), equipos para la filtración y desbaste de agua de regadío y equipos de tratamiento de efluentes industriales. Una larga trayectoría que ha llevado a la compañía a se run referente en soluciones de Smart Water Management en estaciones depuradoras, regadíos e industrias intensivas en gestión hídrica. Soluciones que serán, sin duda, esenciales para conseguir esa anelada – y necesaria – “Sociedad Water Smart”.
A partir de este análisis, en el informe quedan reflejadas algunas recomendaciones para perfilar dicha “estrategia post-COVID19” demandada, que son:
- Trabajar para lograr una “Sociedad Water Smart” para reimpulsar y construir una Europa resistente.
- Apoyar la digitalización para un crecimiento sostenible impulsado por el agua.
- Fomentar una “Sociedad Water Smart” inclusiva para todos los ciudadanos.
- Reforzar el liderazgo europeo para mejorar la solidaridad internacional.
A modo de conclusión, Water Europe sugiere desarrollar y apoyar iniciativas para “reclutar y retener a jóvenes profesionales en el sector del agua”, pues, asegura, en las personas está la clave para construir la “nueva” sociedad. Y, de la misma manera, nombra a los negocios, los cuales – considera la asociación – deberían “invertir” en línea con el Acuerdo Verde y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU.
Con más de 60 años de experiencia, DAGA lidera el desarrollo de equipos para el tratamiento de aguas residuales (EDAR), equipos para la filtración y desbaste de agua de regadío y equipos de tratamiento de efluentes industriales. Una larga trayectoría que ha llevado a la compañía a se run referente en soluciones de Smart Water Management en estaciones depuradoras, regadíos e industrias intensivas en gestión hídrica. Soluciones que serán, sin duda, esenciales para conseguir esa anelada – y necesaria – “Sociedad Water Smart”.